PROBANDO BREATHE RIGHT
Estos días estoy participando en un proyecto de word of mouth sobre las tiras para respirar mejor Breathe Right y te quiero contar mi experiencia con ellas y lo que hasta ahora he podido compartir con las personas de mi entorno con las que estoy compartiendo este proyecto.
La razón principal de apuntarme a este proyecto es que soy asmática y especialmente en épocas en que la alergia me afecta más, me cuesta respirar correctamente tumbada debido a la congestión nasal. Había oído hablar de estas tiras, supongo que quien más quien menos, las hemos visto en anuncios de televisión y se las hemos visto puestas a algunos deportistas de élite durante la competición. Pero no me había animado a comprarlas, no tenía muy claro qué es lo que hacían en realidad y no sabía si el precio que cuestan, algo elevado (según comercios, la tira sale a partir de 0.65 euros y vale para una sola vez), se correspondería con lo que daba a cambio.
La realidad es que el efecto se nota desde que adhieres la tira al puente de la nariz. Es inmediato. Según la información de la marca, respiras hasta un 31% más de aire; yo no tengo forma de cuantificarlo pero se nota al instante. La tira hace que se abran las aletas de la nariz y tengo la impresión de que también logran alzar algo el tabique, de modo que sí, nada más ponérmela, noté que respiraba mucho mejor. Eso es innegable.
Los primeros minutos se hace un poco raro tener algo en la nariz, pero no deja de ser como una tirita y enseguida te olvidas de que lo tienes puesto. Por la mañana, me lo quité sin problemas. En este sentido estaba algo preocupada porque había leído que había que remojar la tira para que no levantase la piel, que podía causar problemas sobre la misma… yo la verdad es que sin fuerza, sin agua y sin más que tirar suavemente de una de las puntas, me he quitado cada mañana la tira sin ningún problema. Y todavía quedaba adhesivo, supongo que podría haberla reutilizado, no lo tengo claro del todo, pero vamos, que no era por falta de adhesivo que se retirara bien.
Así que mis expectativas se han cumplido sobradamente y más; son fáciles de usar, no generan molestias, se nota claramente una mejor respiración, se retira bien y no deja marcas sobre la piel ni afecta a ésta. ¿El precio? Pues si, no es barato porque cada tira es de un sólo uso, o sea para un día o para una noche. Quizá si tendría que usarlas los 365 días del año me echase atrás, pero para momentos puntuales en los que el asma me genera más problemas como en primavera, por ejemplo, tengo clarísimo que las usaré porque merece la pena.
Hasta ahora tengo dos testimonios claros de dos personas de entre las de mi entorno con las que estoy compartiendo este proyecto. En ambos casos son hombres cuya razón para probarla es el tema de los ronquidos. Probadas varios días, me dicen sus parejas que si bien el ronquido no desaparece por completo, si que se atenúa de manera importante. La conclusión general es que en ambos casos, ellos respiran mejor y tienen un sueño más tranquilo y dejan descansar mejor a sus parejas al minimizarse los problemas de ronquidos.
Por el momento tengo claro que si alguien me pregunta, le recomendaré que lo pruebe, porque tanto mi experiencia propia como las primeras impresiones de las personas con las que he compartido muestras y experiencia son muy positivas.