A partir de cierta edad, no es conveniente recurrir a los mismos trucos de belleza y técnicas de maquillado que cuando se es más joven, pues no se precisan los mismso cuidados y se buscan los mismos objetivos. La piel tiende a estar más seca, las arrugas comienzan a notarse (o se notan ya de forma marcada, según a qué edad nos refiramos) y los rasgos son más duros y acentuados. Si estás en una edad (depende de cada persona lo que se viene a conocer como edad madura, pongamos que para unas pasdos los 40, para otras en torno a los 50 y para otras a partir de los 60) en que necesitas renovar todo lo que sabías sobre belleza y maquillaje, estos consejos pueden serte muy útiles.
1.- Los polvos de maquillaje ya no son un amigo, salvo arrugas muy suaves y polvos muy sueltos y transparentes, son más bien un enemigo que tiende a resaltar las arrugas y a hacerlas parecer más profundas, por lo que es conveniente prescindir de él.
2.- Usa la máscara de pestañas un número o dos más oscura en las pestañas superiores que en las inferiores para que la mirada parezca más abierta y los ojos más grandes, pues con la edad tiene a caer algo el párpado y es una buena forma de disimularlo.
3.- Evita los colores de maquillaje fuertes y oscuros.
4.- Utiliza productos especiales para pieles maduras, sean bases de maquillaje, cremas hidratantes y nutritivas, cremas para el contorno de ojos…
5.- Un delineador de cejas puede ayudar a subir la mirada y a dar definición al rostro sin contraindicaciones.
6.- Si a cualquier edad es importante la limpieza del rostro, en pieles maduras es fundamental. Dale el tiempo, dedicación e importancia que requiere, con productos de primera calidad.
7.- Las gafas de sol son tu mejor aliado y te ayudarán a que no se hagan más profundas y abundantes las arrugas del contorno de los ojos.
8.- Usa siempre, siempre, siempre, cremas faciales con protector solar.
9.- Haz a diario ejercicios de gimnasia facial para mantener los músculos del rostro firmes y tonificados.
10.- Una sesión de masaje estético nunca viene mal; un drenaje linfático de rostro, cuello, brazos y piernas, una vez al mes o cada dos semanas, te vendría muy bien para un aspecto más relajado y deshinchado.
11.- Incluye en tu dieta habitual alimentos antioxidantes como los frutos rojos, el aguacate y el té verde, entre otros.
12.- Usa un exfoliante una vez por semana.
13.- Utiliza una crema reafirmante especial para pieles maduras para la zona del cuello y el escote.