Estamos en la época de mayor incidencia de gripe, que casi todos los años coincide en fechas similares. Es, pues, el mejor momento para recordar algunos remedios caseros para aliviar los síntomas de la gripe, trucos de la abuela efectivos para llevar de la mejor manera posible la enfermedad.
1.- Sopa de cebolla. La cebolla tiene propiedades antimucolíticas y expectorantes o, lo que es lo mismo, hace que los mocos sean menos densos y ayuda a expulsarlos. Además es fácil deshidratarse durante la gripe por el sudor y la temperatura alta y aportar hidratación al organismo es importante. Así que una clásica sopa de cebolla es una buena opción para las comidas o cenas cuando tienes gripe.
2.- Infusión de tomillo. El tomillo es antiséptico, expectorante y perfecto para tratar las afecciones de las vías respiratorias. En infusión o añadiendo unas ramitas a la sopa de cebolla, hará su función. Para una buena infusión, calienta agua y cuando esté a punto de hervir, añade 3 ramitas de tomillo por taza (cuarto de litro), tapa y deja reposar 20 minutos.
3.- Infusión de escaramujo. Esta baya, el fruto de las rosas silvestres, tiene una altísima concentración de vitamina C, cuya injesta es muy recomendable mientras pasamos la gripe. Prepara la infusión como la de tomillo pero sustituyendo éste por 2Cd de bayas de escaramujo.
4.- Emplastos de miel para la garganta. La miel tiene propiedades suavizantes. Unta tu cuello en la parte de la garganta con miel, sobre ello dispón un pañuelo doblado y humedecido y sujétalo todo con una pañoleta o bufanda atada al cuello (mejor si no te importa que se manche, puedes coger una vieja, aunque se suele limpiar bien). Dejarlo actuar entre 6 y 8 horas, limpia con agua templada y jabón, seca y vuelve a proceder de la misma forma. Alivia el dolor de garganta y suaviza la misma. Por cierto que de paso notarás mucho más suave la piel del cuello.
5.- Ten siempre a mano botones de eucalipto. Puedes preparar una bolsita de gasa y meterlos dentro, para tenerla junto a la almohada o colgarla del cabecero de la cama y ponerla un lazo para colgarla de tu muñeca y poder acercarla a tu nariz cada vez que quieras, de forma cómoda. Ayuda a respirar mejor.
6.- Limpiar tus ojos legañosos con agua de mar y la ayuda de un algodón. También sirve disolver mediante calor sal marina en agua, pero después hay que dejarlo enfriar hasta tener una temperatura ambiente o muy suavemente templada.
7.- Chupa una cucharilla de miel de azahar. Tiene efectos calmantes y sedantes. Chupar suavemente 2-3 veces al día, ayuda a calmar la irritación de garganta.
8.- Toma un licuado de kiwi cada mañana. Puedes añadirle un chorrito de agua y el zumo de medio limón. El kiwi es rico en vitamina C (mucho más que la naranja), que no cura la gripe pero es un potente antioxidante para el organismo que ayuda al sistema inmunológico, así que es muy recomendable durante la enfermedad. Además, el licuado aporta hidratación al organismo, muy beneficiosa en casos de gripe.