La situación actual sanitaria y social hace que muchas familias estén preocupadas por el inicio del nuevo curso, para el que faltan pocas semanas. Existen multitud de dudas al respecto y realmente no se sabe a ciencia cierta qué ocurrirá, si podrá transcurrir con cierta normalidad o todo lo contrario. Algunos progenitores ven esto con miedo pero otros lo ven como una oportunidad de transformación que puede llegar a ser muy positiva.
Nuevo curso, dudas y oportunidades.
Seguridad sanitaria y nuevo curso, aún muchas dudas en el aire.
La principal duda y preocupación de familias, estudiantes, profesorado y la sociedad en general es cómo afectará el regreso a las aulas a la situación sanitaria global. Parece difícil tomar las medidas de seguridad necesarias para evitar contagios. Y el hecho de que niños y adolescentes en su mayoría sean asintomáticos aún cuando estén infectados hace más complicado frenar contagios con los centros educativos a plena actividad.
Qué hacer y qué ocurrirá son dos dudas aún con muchos interrogantes abiertos. Probablemente haya que esperar para empezar a obtener respuestas.
Oportunidad para lograr mejoras en la escuela y la educación.
Esta situación puede ser una oportunidad para implementar cambios en este nuevo curso que impliquen mejoras a medio y largo plazo. Empezando por la deseada reducción de asistentes por aula. Aunque no es algo que en la mayor parte de los centros educativos se pueda llevar a cabo en sus instalaciones actuales. Ni con sus recursos económicos.
Las escuelas rurales y la llamada España vaciada parecen tener aquí ventaja. Y pueden ser punta de lanza de cambios estructurales duraderos para una mejor educación pública. Atención personalizada, redes de apoyo y cercanía o interacción tutelada entre grupos de edad diferentes pueden ser algunos de estos cambios en positivo.
Mayor implicación de las familias, una oportunidad a aprovechar.
El pasado fin de curso tuvo aspectos negativos y positivos. La mayor implicación de las familias fue un cambio obligado por el confinamiento que si bien en algunos casos fue exigente, en otros casos supuso un cambio positivo para la familia y la comunidad educativa en general. Aprovechar los aspectos positivos de esto y mantener una implicación con la educación de niños y adolescentes es una oportunidad que no debería desperdiciarse.
Menos tiempo al estudio y más al aprendizaje, una oportunidad que debería aprovecharse en el nuevo curso.
Estudiar y aprender no es lo mismo. En países como Finlandia, a la cabeza de los rankings de educación, lo saben bien. Quizá el nuevo curso traiga consigo la oportunidad de aumentar y facilitar el aprendizaje reduciendo el tiempo de estudio. Incluso en caso de nuevos confinamientos o cierres parciales de aulas, es posible que los niños y adolescentes aprendan más con menos horas de estudio.
Nueva escala de valores en la educación.
Está por ver si la vuelta al cole llegará con una nueva escala de valores en la educación pero es muy probable que las circunstancias lo hagan posible. Comprobar que sin deberes y con un tiempo reducido de estudio respecto al actual, los niños se interesan más, aprenden más y sienten la necesidad de obtener conocimiento a través de la experimentación , la investigación y el intercambio de información voluntaria.
Aún hay mucho camino pero en la comunidad educativa, dentro de la preocupación, hay muchas voces que ven la oportunidad de lograr cambios de valores para un futuro mejor.
En qué emplean el tiempo niños y adolescentes y en qué podrían emplearlo.
¿Es necesario que los niños dediquen seis horas de clase y entre una y tres de deberes al día? Para muchas familias y docentes, no. Es más, las voces que alertan de que esto solo consigue el cansancio y desinterés de niños y adelescentes son cada vez mayores. Por ello una de las oportunidades del nuevo curso exista o no reconfinamiento es un cambio de horarios y tiempos.
La tutela de grupos reducidos facilitaría la adquisición de conocimientos con menor esfuerzo y en menor tiempo. Esto dejaría más tiempo para el aprendizaje a través del juego y la experimentación personal. Más tiempo para que cada niños y adolescente se dediquen a materias de su interés personal, favorecidas por un apoyo de progenitores y profesores.
El nuevo curso que aún está por llegar viene cargado de dudas pero en la manos de todo está que también se llene de oportunidades. Si quieres comentar qué esperas del regreso a las aulas, qué te preocupa y qué te gustaría que trajese de positivo puedes hacerlo aquí mismo o a través de nuestras redes sociales. El debate generado puede ser positivo para todos.