Hoy te queremos proponer 7 planes navideños con niños para que disfrutéis toda la familia. Planes diferentes y divertidos para disfrutar en el momento y recordar toda la vida. ¿Te animas a organizarlos con los tuyos?
1.- Prepara una sesión fotográfica al aire libre. Aprovecha un día en que no llueva y planifica una salida al campos, prepara tu cámara de fotos y algunos elementos navideños como bolas para el árbol, espumillon o estrellas hechas en casa por los propios peques. Busca un pinar, un abetal o un lugar en el que pueda haber coníferas (incluídos parques públicos) y sin dañar las plantas, haz unas fotos preciosas a tus hijos con todo el ambiente navideño. Incluso puedes vestirlos de rojo y blanco o disfrazarlos de pastorcillos, de ángeles o de algún otro disfraz propio de la Navidad, para crear más ambiente. Si lo convertís en un juego puedes tener una preciosas fotografías para guardar y recordar toda la vida y un regalo estupendo para abuelos y tíos, bien enmarcadas o enmaquetadas en álbumes personalizados.
2.- Acudid al teatro. En muchas ciudades y pueblos grandes, durante los días navideños se celebran en teatros, centros cívicos y locales culturales representaciones teatrales dirigidas al público infantil. y, cada vez más, se busca también la complicidad y el disfrute de los adultos, para que no sean meros acompañantes de los niños, sino para que también disfruten del espectáculo. Busca en la agenda cultural de tu ciudad y no te pierdas nada.
3.- Organiza una fiesta infantil de intercambio de libros. Puedes hacerlo con amigos, primos y vecinos de edades similares; si te agobia hacerlo en casa, propón hacerlo en un parque público que disponga de mesas y bancos o en un local cerrado como alguna cafetería de confianza con un recinto privado para los peques. Es tan sencillo como que cada niño lleve dos libros a la fiesta y luego para evitar discusiones o peleas por algún libro concreto, da un número al azar a cada niño (puedes poner un papel por cada niño asistente y que los saquen de una bolsa o cajita); cada uno entregará sus libros al que tenga un número inmediatamente superior excepto el del número más alto que se lo dará al del número más bajo de todos. O viceversa.
Será una buena forma de pasar un rato entretenido, quizá amenizado con juegos y picoteos, y si sabes que los adultos también son lectores puedes aprovechar para que también los mayores intercambiéis lecturas. Así tendréis nuevas lecturas para los días de vacaciones.
4.- Acudid a una protectora animal para entregar una donación. Si a tus peques les encantan los animales les gustará colaborar, y muy especialmente si en casa no podéis convivir con uno. Preparad un presupuesto (aunque sea algo módico como 5 o 10 euros) y haced la compra; podéis llevar alimentos, premios comestibles o algún juguete como pelotas para perros o gatos. En muchas protectoras, sobre todo en estas fechas en que arrecia el frío, recogen además mantas y ropa de abrigo; si tenéis alguna un poco desgastada pero servible en casa podéis llevarla y si os gusta hacer manualidades juntos, podéis aprovechar algún jersey o toalla en desuso para hacer con él unos cojines que llevar para los animales del refugio.
5.- Ficha todos los talleres infantiles de los museos de tu ciudad. Es muy probable que en estos días hagas actividades especiales para niños, gratuitas o a un precio módico. Suelen ser actividades divertidas e interesantes y es una buena forma de pasar un rato con otros niños, aprendiendo mientras disfrutan. Además lo habitual es que sean en un espacio cerrado, por lo que se convierten además en un gran plan para días fríos, de lluvia o nieve.
6.- Salid a disfrutar del ambiente navideño callejero. ¿Dónde están los escaparates más decorados de la zona? ¿Hay alguna muestra de belenes o algún árbol de Navidad público para visitar cerca de casa? ¿En qué calles se escuchan villancicos? ¿Dónde podéis comprar unas castañas recién asadas para merendar? Aprovechad este momento único del año y disfrutadlo al máximo.
7.- Aprended a preparar postres navideños. Podéis hacerlo en casa con ayuda de algún libro de cocina o de alguna receta tomada de internet, pero si no quieres manchar la cocina y prefieres aprender de algún profesional, busca escuelas de cocina porque en estas fechas muchas organizan clases y talleres infantiles o familiares que pueden resultar de lo más divertidos y provechosos.
Foto by Pixabay
