Ir de vacaciones con niños y perros puede ser muy gratificante pero también precisa de un poco de planificación extra. Al fin y al cabo viajar con niños y mascotas redobla las responsabilidades. Pero todo merecerá la pena con el disfrute y la felicidad de todos los miembros de la familia.
Ir de vacaciones con niños y perros, consejos prácticos.
Planifica bien el viaje y valora el tipo de alojamiento para ir de vacaciones con niños y perros.
Esto es básico porque necesitarás alojamientos pet friendly que también sean seguros para niños. Además, es importante que ambos tengan donde divertirse y eso implica:
- Que el lugar sea accesible para mascotas. No todos los municipios están preparados para facilitar la vida con perros. Si limitan mucho los accesos a parques y lugares con sombra o de expansión con ellos, mejor opta por otro destino.
- Que los niños tengan dónde y con qué divertirse. Parques, acceso a actividades de ocio…
- Un destino cuyo viaje sea cómodo y seguro para niños y mascotas.
- Que niños y mascotas estén cómodos. Los campings que obligan a tener atados permanentemente a los perros pueden llegar a ser agobiantes para las mascotas si se permanece siempre en el recinto.
Extrema la vigilancia.
Especialmente en lugares como las playas que admiten perros, ríos, pantanos y otros lugares no exentos de cierto peligro. Es muy posible que si el perro está suelto el niño vaya con él. En caso de niños pequeños es especialmente peligroso porque puede dar lugar a ahogamientos o accidentes.
La protección infantil en la playa y de la mascota o en otros lugares con riesgo debe ir de la mano.
Lleva una agenda para emergencias para ir de vacaciones con niños y perros.
Lo ideal es llevarla en papel y en la agenda del móvil para mayor seguridad. Incluye en ella:
- Atención médica pediátrica de urgencia.
- Lugares cercanos con atención veterinaria de urgencia.
- Posibles guarderías o residencias caninas en la zona por si te vieras obligado a dejarle unas horas o una noche por una emergencias.
- Bares, restaurantes y locales a los que puedas acceder con perro.
- Tiendas de productos para mascotas.
Dispón siempre de un plan B.
Para ir de vacaciones con niños y perros mejor preveer que improvisar. Para todos tus planes y excursiones crea un plan B porque pueden cambiar las normativas y puedes encontrarte por sorpresa con lugares de acceso vetado para perros. Además puedes encontrarte con celebraciones con petardos que alteren a tu mascota u otros imprevistos.
Ten siempre agua a mano.
Tanto los niños como los perros necesitan hidratarse con frecuencia. Llevar agua no en verano no es una opción sino una obligación. Así que vayas de paseo, a una excursión de senderismo o por la ciudad, a una playa que admite perros o a cualquier otro lugar, ten siempre disponible agua fresca.
También tendrás que tener un recipiente para que tu perro pueda beber. Y si los niños son pequeños igualmente para ellos. No te confíes incluso si ya conoces tu lugar de destino, no siempre las fuentes públicas están operativas. Y puede que desde que viajaste allí por última vez haya habido cambios en este sentido.
Estos consejos para ir de vacaciones con niños y perros te facilitarán disfrutar de unos días en familia felices y satisfactorios para todos. ¡Disfrutad del viaje y la estancia!
