La nomofobia o adicción al teléfono móvil es un problema que cada vez tienen más personas, y que condiciona su vida hasta extremos terribles. Te contamos 16 señales de que eres adicta al móvil. Y esperamos que no tengan nada que ver con tu día a día.
1.- Aunque tengas teléfono fijo en casa, duermes con el móvil encendido.
Y además lo tienes pegadito a ti: en la mesilla o incluso debajo de la almohada. No importa si en meses o años nunca ha sonado a deshoras. Tú alegas un “por si acaso” y te quedas tan ancha.
2.- Miras constantemente el teléfono aunque no suene, para ver si está encendido o se ha quedado sin batería.
Es una acción casi refleja. Pero sabes que lo haces varias veces al día. Algunas veces, incluso pasan pocos minutos entre una y otra ojeada al teléfono.
3.- Durante la comida o la cena, tienes el móvil en la mesa.
Eso cuando no lo estás usando directamente a la vez que comes. No puedes perder el tiempo y te resulta más importante que la conversación familiar, que ser consciente de lo que estás comiendo o que lo que acontece a tu alrededor.
4.- Ves programas de televisión utilizando el teléfono móvil al mismo tiempo.
Puedes hacer dos cosas a la vez. Comentar el programa que ves en las redes sociales, por ejemplo. Aunque te pierdas los subtítulos. O responder whatsapps y correos. O usar las redes sociales. Pero tampoco quieres apagar la televisión porque dan un programa que “estás viendo”.
5.- Durante las horas de trabajo miras el móvil más de 4 veces.
Aunque esté prohibido por las normas internas. Aunque tengas que esconderlo o escaparte al vestuario o al baño al mirarlo. Porque, ¿y si has recibido una llamada, un correo o un whattsapp en ese rato? A lo mejor se paraliza el mundo hasta que puedas leerlo.
6.- Quedas con amigos o vas al médico y no dejas el móvil silenciado.
Porque, ¿y si te suena y no lo oyes? Además no tienes problemas en usarlo aún en mitad de una conversación. ¡Lo primero es lo primero!
7.- Lo primero que haces al levantarte cada mañana, es consultar el móvil.
Antes de lavarte la cara, o de ducharte o de desayunar. Porque tienes tus preferencias y el teléfono móvil está a la cabeza de todas ellas.
8.- Lo primero que haces al llegar a un lugar es preguntar por el wifi.
Lo haces en una cafetería o en la sala de espera del dentista. Y en casa de tu tía el día de su cumpleaños. Lo haces en un hotel antes de registrarte. Y en cualquier lugar al que llegas y sabes que dispone de wifi.
9.- Te pones nerviosa cuando te queda poca batería.
Aunque estés en casa. Aunque no esperes una llamada urgente ni lo necesites para trabajar. De hecho, incluso tienes una o dos baterías de repuesto. Y eres capaz de enchufar el cargador incluso en el baño de un bar o en la peluquería.
10.- Estás en más de 8 grupos de Whatsapp que usas a diario.
Y quieres enterarte de lo que ocurre en todos todo el tiempo. Eres una de las miembros más activas de cada uno de ellos. Y te cabrea enormemente que haya quien no responde al momento.
11.- Te provoca ansiedad ver que han publicado cosas en un grupo de whatsapp y es demasiado largo para leerlo en cinco minutos.
Porque necesitas enterarte de todo al instante. Y teclear a toda velocidad una respuesta inmediata. En caso contrario te empiezas a poner nerviosa. Te entran agobios y mareos. Te tiembla el pulso. Cuando no todo ello al mismo tiempo.
12.- Miras una app meteorológica para ver cómo hace en lugar de mirar por la ventana.
Y remarcamos el ver cómo hace, no ver la previsión para saber cómo hará al día siguiente. Todo un clásico.
13.- Tienes instaladas un apps que prácticamente no usas nunca.
Pero por si acaso las bajaste y aunque en meses no las hayas tocado, por si acaso ahí se quedan.
14.- No te importa perder el autobús porque así tienes más tiempo de usar el móvil.
De hecho, en demasiadas ocasiones, incluso lo prefieres. También se ha dado el caso de que alguna vez, ocupada con el teléfono móvil, te hayas pasado de parada. Pero no te has atrevido a contárselo a nadie.
15.- Pasas más tiempo con el teléfono en la mano que guardado.
Es que si suena tardas mucho en abrir el bolso y cogerlo. O en sacarlo del bolsillo.
16.- A la hora de elegir ropa descartas prendas que te gustan mucho porque no tienen bolsillo para el móvil.
Porque es tan importante como que te siente bien. O cuánto cuesta. Cuestiones prácticas
Después de leer esto, ¿crees que eres adicta al móvil?
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