El estilo rústico sigue estando de moda y parece que, con matices propios de cada época, nunca dejará de estarlo. Si quieres crear un baño rústico y práctico, estos consejos te ayudarán a hacerlo sin romperte la cabeza y sin dejarte un dineral en materiales y diseños.
1.- Combina madera nueva con madera vieja.
¿Puedes imaginarte un baño rústico sin madera? Combina la madera nueva con otra envejecida. Pero no utilices muchos tonos diferentes; uno en la madera nueva y uno o a lo sumo dos en la vieja será suficiente. Por ejemplo, puedes utilizar armarios de madera nueva y tachonar el techo con listones viejos. O utilizar una puerta de madera de segunda mano para reconvertirla en un mueble de estantes. Desata tu imaginación y comprueba de qué presupuesto dispones para esta partida sin disparar el gasto en ella.
2.- La piedra da un aspecto rústico.
Aunque no siempre es económica. Si quieres crear un baño rústico y práctico y dispones de una estancia de buen tamaño, puedes poner un lavabo de piedra; en comercios de jardinería encontrarás buenas soluciones. Pero si el espacio es escaso y un lavabo así lo recargaría en exceso, prueba otras alternativas, como poner una piedra de jardín a modo de taburete o mesita auxiliar junto a la bañera. O un alicatado de piedra falsa de calidad alrededor del espejo de lavabo, sin recargar la estancia.
3.- Busca elementos antiguos que combinen bien con tus elementos nuevos.
Esto te permitirá ahorrar dando uso a elementos de los que ya dispones. Puedes usar vasos clásicos para los cepillos de dientes o para colocar flores frescas en una repisa. O viejos platos de porcelana esmaltada para los jabones de tocador. Mira con la mente abierta los elementos de los que dispones para comprobar cuáles pueden dar a tu baño ese toque rústico que deseas.
4.- No recargues la estancia.
Simplicidad ante todo. Es fácil caer en la tentación de incluir todo lo que te gusta pero debes evitar ese error a toda costa. Además de cargarte e efecto que deseas estarías haciendo que tu baño resulte poco práctico para el día a día.
5.- Prescinde del plástico.
Es imposible tratar de crear un baño rústico y práctico y que el plástico tenga presencia en él. No es posible. Elimina cualquier elemento de este material que caiga en tus manos.
6.- Recicla.
Un baño rústico y práctico se prestar a ser imaginativo y reciclar elementos que le aporten una personalidad única. Mira a tu alrededor o date una vuelta por una tienda de objetos de segunda mano. Quizá quieras reconvertir el pie de una vieja máquina de coser en un mueble de baño rústico y práctico sobre el que ubicar el lavabo. O emplear antiguas cajas de madera para el almacenamiento de toallas. Las posibilidades son infinitas.
7.- Cuerda y zinc, permitidos.
Son dos elementos que tratados con imaginación pueden dar, por poco dinero, ese aspecto rústico y cálido que deseas para tu baño. Si te faltan ideas siempre puedes darte una vuelta por pinterest para buscar inspiración. La encontrarás a raudales.
8.- No te olvides del almacenaje.
Si quieres disponer de un baño rústico y práctico no puedes olvidarte de la importancia del espacio para almacenaje. Aunque se trate de un baño de pequeño tamaño. Estantes o armarios son imprescindibles para poder guardar todo lo que precises para su uso continuado sin que pierda la esencia y la personalidad de que le dotes.
9.- Los detalles marcan la diferencia.
Porcelana esmaltada en platos o jarras, cristal antiguo en forma de tarros de almacenaje o de vasos para flores frescas o cepillos de dientes, cuencos cerámicos para jabones, cestos de arpillera o de mimbre para toallas… en los pequeños detalles está la diferencia.
Con estos consejos te resultará muy sencillo crear un baño rústico y práctico sin necesidad de realizar un gran desembolso económico.
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