Si aún no has planificado tus próximas vacaciones estás en un momento estupendo para hacerlo. Veranear en Castilla y León es una buena idea por muchas razones. Estas son las principales por las que merece la pena pasar unas vacaciones de verano en Castilla y León.
Por qué veranear en Castilla y León.
1.- Veranear en Castilla y León es barato.
Comparado con otros destinos dentro de la España peninsular, Castilla y León es una región barata. Y no es que no cuente con alojamientos exclusivos y de lujo, como todas. Pero los precios medios de los hoteles de 3 estrellas, las casas rurales y los campings están entre los más económicos del país.
Además, es fácilmente accesible tanto desde las regiones del sur y centro de la península como desde las de la cornisa cantábrica. Y en aeropuertos como el de Valladolid llegan periódicamente vuelos low cost desde otras ciudades españolas y del extranjero.
Por si esto fuera poco, provincias con grandes atractivos turísticos de cultura, deporte y naturaleza como Palencia, Zamora o Soria están entre las más baratas de toda España a nivel de precios. Entradas a museos, comer o cenar en locales de restauración, las opciones de ocio nocturno o contratar paquetes de deporte aventura es asequible en ellas y más económico que en otras regiones.
Todo ello hace que veranear en Castilla y León permita disfrutar de las vacaciones de modo económico en relación a los servicios disfrutados.
2.- Las opciones de ocio y cultura en Castilla y León son enormes.
Castilla y León tiene 9 provincias en las que la cultura y el ocio ofrecen infinidad de oportunidades para todos los gustos.
Museos, monumentos, fiestas populares, vestigios de la antigüedad, teatros, verbenas o atractivos arquitectónicos son solo algunos de ellos, repartidos por todo el territorio.
Las posibilidades para practicar deportes al aire, libre, hacer senderismo o escalada y deporte de aventura también son enormes en todas las provincias.
3.- Ciudades, montañas y llanuras, para distintos tipos de veraneantes.
Es la Comunidad Autónoma más extensa de España y está salpicada de ciudades y pueblos de distintos tamaños, con una orografía que va desde las amplias llanuras de Tierra de Campos a las montañas de la Cordillera Cantábrica en León y Palencia. Pasando por otros muchos paisajes en provincias como Burgos, Ávila o Segovia y entornos que multiplican las opciones para los visitantes.
Veranear en Castilla y Leon permite elegir entre diferentes espacios al gusto de cada visitante.
4.- La naturaleza de la región es impresionante.
Aunque solamente nos circunscribiéramos a los 14 Parques Naturales de Castilla y León, esto ya daría una muestra de la impresionante naturaleza de la región. Además cuenta con un gran número de reservas naturales y 70 zonas de especial protección para las aves. Y un Geoparque natural Mundial, el de Las Loras, declarado así por la Unesco.
Todo ello da muestra de la riqueza de los paisajes y la naturaleza de la región. Sin duda una buena razón para veranear en Castilla y León.
5.- La gastronomía, una de las principales razones para veranear en Castilla y León.
La gastronomía de Castilla y León es rica y variada. Desde el turismo enológico en la Ribera del Duero a los productos con Denominación de Origen como el Botillo del Bierzo, el queso zamorano o la mantequilla de Soria, las posibilidades para el amante de la buena gastronomía son grandes en toda la comunidad.
Platos recios y tradicionales, tapeos modernos y cocina de autor pueden ser degustados, según los gustos de cada persona que decida veranear en Castilla y León, dentro de su amplia oferta en restauración.
6.- Algunas de las rutas más míticas de España pasan por Castilla y León.
Algunas de las rutas más tradicionales y míticas de España pasan por Castilla y León. Todo amante del senderismo, las rutas en bicicleta o incluso a caballo las disfrutará. el Camino de Santiago, la Ruta del Cid o la Ruta de la Plata son algunas de ellas.
Veranear en Castilla y León es una excelente decisión si aún estás planificando tus vacaciones. Explora tus posibilidades y descubre una región que tiene mucho que ofrecer al visitante.
