El yogur, además de ser un alimento muy saludable y apetitoso que suele gustar tanto a peques como a grandes, es una base estupenda para preparar postres fáciles y deliciosos en cuestión de minutos y sin complicarnos nada la vida. Te contamos cómo hacerlos, y luego sólo necesitarás dejar volar tu imaginación para preparar las más sabrosas combinaciones.
* EL RECIPIENTE.
Puede que os suene absurdo, pero el recipiente en el que se servirá es casi tan importante como los ingredientes que se utilizarán para preparar el postre. Para postres a capas, elige vasos o cuencos de cristal transparente; para días de fiesta, mejor optar por copas tipo cóctel o vasos de chato; para diario elige cuencos de desayuno o platos hondos; para llevar de picnic o como colofón de un menú estilo rústico, quédate con tarros bonitos; para el verano, lo mejor son las copas de helado. Juega con tu imaginación y piensa en qué tipo de recipiente lucirá mejor cada tipo de postre.
* AGRIO VS DULCE O PLENAMENTE DULCE.
El yogur es estupendo para jugar con los diferentes sabores y si te gustan ese tipo de contrastes, no dudes en aprovecharlo usando el yogur tal cuál, sin ningún tipo de edulcorante y combinándolo con otros elementos de marcado dulzor como daditos de frutas en almíbar o confitados, por ejemplo, cristalitos de caramelo machacados o frutos secos caramelizados.
Pero si preferís que el postre sea completamente dulce, es tan sencillo cómo edulcorar el yogur como primer paso. No te limites a usar azúcar y juega con todos los matices de dulzor y sabor que puedas encontrar en el mercado, como utilizando diferentes tipos de mieles y mermeladas, sirope de agave o de savia de arce, azúcar moreno de caña…
* FRUTA FRESCA.
La fruta fresca y de temporada es estupenda para preparar postres rápidos a base de yogur; puedes trocearla y mezclarla con el mismo, disponer alternativamente capas de fruta con capas de yogur, pasar ambos ingredientes por la batidora para lograr cremas dulces, disponerla sobre el yogur cortada en daditos, laminada o rallada…
Para un buen postre rápido usa sólo uno o dos tipos de fruta cada vez, salvo con las frutas del bosque, que admiten bien una mayor variedad de sabores juntos. Hay combinaciones que son un éxito seguro como el plátano con las fresas, la piña con el coco, la manzana con la pera, el coco con el plátano, la piña con las fresas o los melocotones con las frambuesas, por nombrar sólo algunas.
* FRUTAS SECAS.
Las frutas secas o deshidratadas además de una potencia de dulzor muy buena son estupendas para preparar postres rápidos porque duran mucho tiempo en buenas condiciones y si surge preparar un postre especial, podemos recurrir a ellas en cualquier momento. Puedes mezclar sabores o quedarte con uno sólo para combinar con otro tipo de ingredientes como cereales frutos secos. Las de menor tamaño las puedes servir enteras (uvas pasas, arándanos secos…) y las de mayor tamaño (orejones, ciruelas pasas, dátiles…) pueden ir picadas o laminadas. Lo ideal es ponerlas sobre el yogur para que no se reblandezcan ni pierdan textura y para que su color anime el plato.
* FRUTOS SECOS.
Crudos o tostados, son perfectos para combinar con el yogur, por su sabor, por su textura y hasta por sus propiedades nutricionales. Para los más golosos, puedes caramelizarlos en una sartén con azúcar, pero tal cuál serán un punto de sabor muy interesante para muchos postres. Prueba a combinar además de con el yogur con algunas frutas frescas: pistachos con melocotones, albaricoques o fresas frescas; nueces con peras o manzanas, avellanas con plátano o manzana; piñones con peras o plátanos; almendras con fresas, frambuesas o nectarinas, por mencionar sólo algunas combinaciones.
Pero no te limites y luego también con chocolate, cereales o frutos secos.
* CEREALES Y SEMILLAS.
Sean copos de cereales (avena, centeno…) o pipas (de girasol, calabaza, amapola…), por separado o combinados entre si o con otros ingredientes. Sea muesli preparado, granola o cereales de desayuno (arroz inflado, trigo inflado chocolateado, copos de maíz tostado…). El juego que pueden dar con el yogur es increíble. Los copos al natural y la granola son ideales para servir en capas alternas con yogur; los cereales inflados o las pipas o semillas son perfectas para servir sobre el yogur.
En cualquier caso, son riquísimos para jugar combinando con otros tipos de ingredientes. Prueba a servir granola con copos de coco y dados de plátano, semillas de amapola con manzana rallada y nueces caramelizadas, copos de maíz tostado con peras o copos de avena con frambuesas y chocolate negro picado, por darte sólo algunas pistas. Tus gustos e imaginación te dictarán las combinaciones más sabrosas.
* CHOCOLATE.
Cacao puro en polvo, chocolate negro, con leche o blanco picadito, pepitas de chocolate negro o blanco, virutas de chocolate… Cualquier opción es buena para tus postres con yogur. No te cortes y prueba todas las combinaciones que saborees en tu imaginación.
* ESPECIAS.
Es una forma rapidísima y comodísima de dar diferentes matices de sabor a un plato. Puedes mezclar las especias con el mismo yogur (esencia de vainilla, cardamomo molido, canela en polvo…) y luego montar el resto del plato como mejor te parezca.
* EL MONTAJE.
Para que quede perfecto, hazlo poco antes de servirlo. Ya ves que para combinar varios sabores, colores y aromas no necesitarás nada más que unos pocos minutos, incluso para varios comensales, si tienes invitados, por ejemplo. Procura que además de sabroso quede bonito y apetecible, y tendrás el éxito asegurado.
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